Cuando Henry Ford se propuso construir un automóvil accesible y asequible, tuvo que poner en marcha todos los mecanismos de una línea de ensamblaje, un claro símbolo de la era industrial. Pero en la era de la información, los Henry Ford necesitan poner en el lugar correcto a los talentos necesarios para construir un negocio exitoso. Este es el desafío que impulsa el desarrollo de la gestión del talento

¿Qué es la gestión del talento?

La gestión del talento va más allá de los recursos humanos tradicionales. La gestión del talento implica identificar los talentos clave que impulsarán el éxito de la empresa y garantizaran que estas personas talentosas se encuentran localizadas, nutridas y retenidas. Al principio, la gestión del talento se centraba principalmente en los altos cargos empresariales, pero las mejores empresas se han dado cuenta de que los talentos y las personas que contribuyen con ellos tienen que existir a lo largo de toda la compañía.

Debido a que estos talentos y personas son vitales para el éxito de la organización, la gestión del talento no puede dejarse solo en manos del departamento de recursos humanos que tiene como objetivo reclutar, revisar y asignar la nómina en toda la organización. La gestión del talento comienza con el CEO y se extiende por toda la compañía, pasando por los altos cargos, los intermedios y más allá. Muchos creen que la gestión del talento se ha convertido en el rol principal del CEO.

Jack Welch, un antiguo CEO de General Electric, dijo muy acertadamente: «Mi trabajo principal era desarrollar talento. Fui el jardinero y proporcionamos agua y otros alimentos a nuestros 750 empleados. Por supuesto, tuve que sacar algunas malas hierbas».

¿Por qué la gestión del talento es importante para tu negocio?

McKinsey & Company realizó la primera investigación exhaustiva sobre la gestión del talento en 1997 y señaló la importancia de esto para las empresas exitosas. La compañía llevó a cabo una segunda ronda de entrevistas en el año 2000, con un total de 13,000 entrevistas con gerentes en 112 grandes empresas de EE. UU. Los hallazgos sobre el impacto de fomentar el talento en las empresas fueron asombrosos:

  • En la industria manufacturera, las empresas con los mejores gerentes de planta aumentaron las ganancias en un 130 por ciento, mientras que las de menor desempeño no mostraron mejores resultados.
  • En los servicios industriales, las empresas con los mejores managers aumentaron las ganancias en un 80 por ciento, mientras que las compañías con un rendimiento más bajo por parte de los altos cargos mantuvieron las ganancias estables.
  • En servicios financieros, los gerentes con un mejor desempeño aumentaron un 50 por ciento, mientras que los de peor desempeño no mostraron ningún aumento.
  • Y, por último, las empresas más comprometidas con la gestión del talento mostraron un retorno para los accionistas de 22 puntos porcentuales por encima de la media.

A menos que ganar dinero no sea el objetivo de tu negocio, es fácil reconocer la importancia de tener una buena gestión del talento.

Los cinco elementos de McKinsey: la fórmula del talento

Teniendo como base el estudio sobre la estructura de las empresas exitosas, McKinsey & Company desarrolló una estrategia llamada; Los Cinco Elementos de la Formula del Talento.

Los gurús y altos cargos del talento han ido añadiendo sus propias experiencias sobre la fórmula en los últimos 20 años. La adopción de esta fórmula depende de cada negocio y sus necesidades, pero estos cinco elementos siguen siendo una base sólida:

  1. Adopta una mentalidad de talento en todos los niveles de la organización, comenzando por los altos cargos: una mentalidad de talento significa que todos los líderes adquieren el concepto de que desarrollar y retener talento es la clave Nº 1 para el éxito de su empresa. Los líderes de todos los niveles serán los encargados de reclutar, nutrir y retener el talento y, lo más importante, serán responsables de su contribución al desarrollo de la compañía.
  2. Crea una propuesta de valor ganadora para empleados (EVP, por sus siglas en inglés) tiene el objetivo de atraer talento a la empresa y retenerlos. Los EVP responderán a la pregunta: ¿Por qué la gente con talento querría trabajar aquí? Si bien los EVP pueden variar según las posiciones o departamentos, todos deben incluir estos cuatro elementos en el discurso:
  • Trabajo emocionante: las personas con talento, en primer lugar, necesitan encontrar desafíos en el trabajo que realizan.
  • Gran compañía: los talentos se mantendrán dedicados a su trabajo sólo si sienten que la empresa está bien administrada, respeta sus ideas y compromiso.
  • Riqueza y recompensa: las personas con talento deben ser reconocidas por el valor que agregan a la empresa con buenos salarios y beneficios corporativos. Una compañía que tiene a una escala salarial rígida no atraerá ni retendrá talentos.
  • Crecimiento y desarrollo: los talentos se esfuerzan por aprender y avanzar constantemente, por lo que nutrir ese deseo es esencial para retener al mejor talento.
  1. Recluta continuamente talentos: las empresas y los managers comprometidos con la gestión del talento están constantemente a la búsqueda del mejor talento. Si bien el talento creciente de abajo hacia arriba puede haber funcionado en los viejos modelos de negocios, las mejores compañías deben estar dispuestas a atraer nuevos talentos para tapar agujeros en todos los niveles, incluso en los altos cargos.
  2. Desarrolla a grandes líderes: la noción de un líder nato. La mayoría de los líderes son nutridos en sus roles al ser desafiados a mejorar, apoyados cuando fallan y empujados nuevamente. Los programas de tutoría brindan una gran oportunidad para desarrollar un buen liderazgo en toda la organización.
  3. Diferencia y afirma: las empresas a menudo se enfrentan a la tentación de tratar a todos los empleados de la misma manera, pero esto solo lleva a la creación de empleados que están cortados por el mismo patrón y no a líderes talentosos. Los empleados con mejor desempeño deben ser recompensados ​​con nuevas oportunidades de trabajo y desafíos, aumentos salariales, beneficios especiales y recompensas. Por supuesto, como mencionó Jack Welch, debes estar dispuesto a eliminar las malas hierbas.

Mejores prácticas sobre la gestión del talento

La compañía Fortune 500 desarrolló un sistema de gestión de talentos muy diferente, pero muchas de estas prácticas se seguirán aplicando en los negocios:

  • Crear una mentalidad de talento: esta idea debe comenzar en la parte superior y fluir por toda la empresa. Los responsables en cada uno de los niveles deben estar al cargo de reclutar, desarrollar y retener talentos. Los nuevos empleados que entran a la empresa deben ser conscientes de que su talento serán reconocido, reforzado y recompensado.
  • Adopte una nueva visión de los empleados: debes reconocer que pocas personas esperan tener un compromiso de por vida con una compañía cuando les contratan. Por ellos, la compañía debe desarrollar una cultura y un entorno que aliente a los empleados a quedarse. Algunas empresas incluso se refieren a sus empleados como voluntarios, ya que su compromiso de permanecer en una empresa se considera voluntario.
  • Recluta como vendes: Reclutar talentos ya no es una cuestión de aceptar cientos de currículums y esperar que llegue lo mejor a tu mesa. Debes considerar el proceso de entrevistas como tu oportunidad de vender la visión y misión de tu compañía a nuevos talentos.
  • Recompensa, recompensa, recompensa: no temas ser acusado de brindar un tratamiento especial a tus mejores talentos. Ellos son especiales. Ellos hacen que tu compañía sea especial, merecen un trato especial. Y ese tratamiento especial podría ser justo lo que mantiene a tus mejores talentos en la empresa. Además, este trato especial hará que su empresa también atraiga a más talentos externos.

Una recompensa simple que atraerá a los mejores talentos a tu empresa es la afiliación a gimnasios mediante Gympass. Esta afiliación crea un beneficio mutuo para su empresa, ya que su mejor talento será más saludable, más feliz y mentalmente renovado cuando sigan una rutina regular de ejercicios por todo el mundo.